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A mi no me contaban los cuentos así, las versiones que yo conozco son mucho más sosas.
Hoy he visto el anuncio de dos pelis que tratan sobre cuentos infantiles, Raphunsen, la del pelo largo encerrada en una torre se ha convertido en una aventurera, con una melena rubia mágica de un montón de metros, que la utiliza con Indiana Jonnes el látigo.
Eso es estupendo que a mi las princesas sosas y aburridas no me gustan y no creo que den una imagen políticamente correcta en estos años.
El otro anuncio de peli ha sido Caperucita, madre mía, la nueva Caperucita, qué peligro tiene!!
Estoy segura que la nueva versión del cuento No es recomendada para menores de 18 años.
Que el anuncio promete, desde luego esta Caperucita tiene poco de pavita.
Estoy pensando en otros cuentos que como les de por versionar los dos rombos no se los quita nadie:
La Cenicienta, trataría el tema de los ilegales, del trabajo sin papeles, de los botellones, claro, que en vez de baile harían botellón.
Jack y las habichuelas mágicas, este cuento estaría ambientado en la Vegas y el juego ilegal.
Rizitos de Oro y los tres Ositos, una niña con bulimia que se come todo lo que encuentra en su camino.
Blancanieves y los 7 enanitos, jejeje, seguro que todos pensamos en otra versión del cuento.
Pero bueno a lo que vamos, que las nuevas versiones están hechas más para adultos que para críos, que me imagino la situación en casa:
La mamá rogándole a la niña ir a ver la película al cine: cariño, hija vamos al cine y te aumento la paga a 20 euros semanales.
La niña le dice a su madre: que no mamá, que me quedo estudiando, que mañana tengo examen de inglés.
Y entonces se producen situaciones a la puerta del cine parecidas a las de los días de estreno de la Saga Crepúsculo, que ves a un montón de treinta añeras en la cola del cine y no sabes si están comprando las entradas a sus hijas, esperando a que salgan o intentando entrar.
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